martes, 28 de junio de 2016

Mi Opinion de Me Before You - La pelicula


Hola a todos! Empiezo esta semana en el blog con mi opinión sobre la película Yo antes de ti que acaba de estrenarse hace poco.

Como me imagino que la mayoría la leyó el libro, no creo que haya algún spoiler, dado que ya sabemos la historia. Intentare no soltar algo mas.

Este domingo por fin pude ir al cine a ver la película, acompañada por una de mis mejores amigas, la cual no había leido el libro pero el trailer le había encantado.
Les voy a contar toda nuestra experiencia:




Nosotras habíamos planeado ver la función de las 6:50 o de las 7:10, hicimos fila para comprar los boletos y resulta que ya no tenían lugares para esas funciones, y la siguiente era hasta las 7:55, faltaba casi una hora, pero aun así compramos dos boletos.

Volvimos a hacer otra fila aun mas larga para dulcería, pero no importaba, teníamos tiempo de sobra, después de comprar nuestros nachos y refresco, nos acercamos a la sala que nos tocaba, todavía faltaban como 20 minutos para la hora de la función. 

Mientras el tiempo pasaba mas personas se empezaron a juntar en esa parte del cine, era obvio que todas iban a ver la misma película que nosotras, el problema era que todavía no abrían la sala y las personas seguían llegando y juntándose en ese reducido espacio. Yo me empece a molestar por que es lógico que deben abrir una sala mínimo 5 minutos antes de que empiece la película, para que la gente pueda entrar y acomodarse. Pasadas las 8 por fin quitaron la cinta de la puerta y pudimos entrar (No lo había mencionado pero para este punto ya casi nos terminábamos los nachos jajaja).

Y Ahora si, comenzó lo que tanto esperaba:







Pocas veces he tenido esa sensación de emoción cuando empiezan los créditos iniciales en una película, esta fue una de ella. no se por que pero cuando salio el titulo "Me Before You" de una forma tan sencilla y elegante supe enseguida que iba a ser una buena película. 



Tenia mis expectativas normales, por que sentía que si estas hubieran estado muy altas, la película no las habría cumplido. Y no quería salir de la sala decepcionada

Hasta esa mañana no sabia que el guion lo había escrito la misma Jojo Moyes juntos con los guionistas de "Bajo la misma estrella" solo por este detalle tenia la esperanza de que respetaran lo hermoso del libro. 


Pude notar que la película tuvo una muy buena producción, los actores representaron muy bien sus papeles, aunque hubo momentos donde sentí a Emilia un poco forzada, pero aun así me gusto mucho la actitud que le puso al papel de Lou. 



De Sam creo que no tengo nada malo que decir, y no solo por que sea el (Tengo un enamoramiento con el no me juzguen) sino por que en verdad interpreto muy bien a Will, sus actitudes justo como el libro, al principio groseras y después amable, sus gestos son tan naturales. Ok, ya lo estoy alabando, perdón. 

De los demás personajes tengo algo negativo que decir, no sentí que se les diera el crédito suficiente a los padres de Will tal y como en el libro, yo necesitaba ver representado de algún modo el capitulo de la señora Traynor.

Si pudiera decirles algo malo de la película fue que obviamente que hubo partes que no aparecieron en la película y esta bien, eso es lo que pasa con las adaptaciones, pero como lectora sentí que tuvo que haber una forma de incluir esas cosas que faltaron. 

Me encanto que se esforzaran tanto en cada detalle y en los escenarios muy bien representados, el soundtrack adecuado y los outfits de Louisa fueron tal y como me los esperaba, y sus zapatos, dios, necesito un par de esos en mi vida. 




Ya casi acercándose el final, me empece a preocupar por que no había derramado ninguna lagrima y eso amigos míos, es muy raro en mi. Pero después de cierta escena en la playa ese familiar sentimiento de tristeza empezó a florecer y unas cuantas lagrimas salieron. 
A pesar de saber lo que pasaría al final, cuando lo estaba viendo sentí tanta emoción que fue en ese momento que empece a llorar de verdad y mantuve mi pañuelo todo el tiempo que Lou lee la carta, los primeros créditos finales aparecieron y con eso me seque los restos de mi ataque emocional. 



Espero que mi siguiente comentario no suene mal pero es muy diferente el modo en que una persona que leyó el libro aprecia la película a diferencia de alguien que no lo hizo. 
El lector ya sabe como se desarrolla la historia, sabe que detalles y cosas son importantes, sabe el por que de las cosas, etc. Mientras que la otra persona va a disfrutar la película pero no de la misma manera, comprendo que a veces por esto hay quienes preguntan ciertas cosas al de al lado (lector)

Pero es que hay algunas personas que de verdad se pasan, gracias al karma termine al lado de un individuo que se la pasaba preguntando algo que era obvio, por ejemplo en la boda, ya antes se había explicado en la película quienes eran los que se casaban, bueno pues esta persona vuelve a preguntar al de al lado "¿entonces el mejor amigo se caso con su ex novia?". Por dios, que no acabas de ver que lo dijeron en la película. 
Debieron ver mi cara cada que esta persona decía algo, fue lo único que me molesto mas que nada. 



Una película bien hecha y que sin duda fue fiel al libro, mantuvo la escencia de la historia y dejo a los espectadores con los sentimientos a flor de piel. Ya muchos saben como termina la historia, en la reseña que subí del libro alguien me dejo un comentario diciendo que el final era duro pero realista, y tiene mucha razón. 

Hay que tener mucho valor para hacer lo que Will hizo, y por parte de su familia también y en cuanto a Lou hizo lo que muchos aun no sabemos, amar a alguien y dejarlo ir cuando es lo mas adecuado.
Como nota final, cumplí la misión que me propuse, le estuve dando pañuelos a mi amiga desde que empezó a llorar como recién nacido (en realidad eran servilletas pero el propósito era el mismo). Espero que esta ... ¿reseña?, ¿critica? o como quieran llamarlo les haya gustado, también espero que ya hayan ido a ver la película y si no es así, espero que les guste tanto como a mi y que la disfruten. 
Nos leemos en la próxima entrada, un beso :) 

viernes, 24 de junio de 2016

Reseña: Yo antes de ti - JoJo Moyes



Titulo Original:  Me Before You

Autor: JoJo Moyes

Año de lanzamiento: 2012 (ingles) 2014 (español)

Editorial: Suma de Letras

Paginas: 496 paginas 









SINOPSIS: 
Louisa Clark sabe muchas cosas. Sabe cuántos pasos hay entre la parada del autobús y su casa. Sabe que le gusta trabajar en el café Buttered Bun y sabe que quizá no quiera a su novio Patrick.

Lo que Lou no sabe es que está a punto de perder su trabajo o que son sus pequeñas rutinas las que la mantienen en su sano juicio.

Will Traynor sabe que un accidente de moto se llevó sus ganas de vivir. Sabe que ahora todo le parece insignificante y triste y sabe exactamente cómo va a solucionarlo.

Lo que Will no sabe es que Lou está a punto de irrumpir en su mundo con una explosión de color.

Y ninguno de los dos sabe que va a cambiar al otro para siempre.

Yo antes de ti reúne a dos personas que no podrían tener menos en común en una novela conmovedoramente romántica con una pregunta: ¿Qué decidirías cuando hacer feliz a la persona a la que amas significa también destrozarte el corazón? 



OPINIÓN PERSONAL:
No es la primera vez que leo este libro, y creo que a varios les he dejado un comentario ya sea si lo han reseñado o si lo han mencionado en sus entradas. 

A estas alturas ya saben que este libro es uno de mis favoritos, que me encanta y que me dejo un muy buen mensaje cuando lo leí hace mas de un año, como esta semana se estreno la película, decidí releerlo y escribir una reseña. 

Es sobre el libro, y por tanto no voy a incluir ninguna imagen que muestre a Emilia y a Sam como los protagonistas.

"Intenté existir, nada más, intenté absorber al hombre al que amaba mediante ósmosis, intenté grabar lo que quedaba de él sobre mi cuerpo."

Louisa Clark, la protagonista, tiene 26 años y acaba de perder el trabajo que tenido durante mucho tiempo, presionada por su familia para encontrar otra fuente de ingresos acude a la oficina de empleo, tras un par de fracasos, termina acudiendo a una entrevista para ser cuidadora de un tetrapléjico.

"Hay ciento cincuenta y ocho pasos entre la parada del autobús y la casa, pero pueden llegar a ser ciento ochenta si se camina sin prisa, como al llevar zapatos de plataforma."

Will Traynor es un hombre que quedo en una silla de ruedas después de un accidente de moto (Punto curioso, el ni siquiera iba conduciendo, solo cruzaba la calle). Antes de esto Will era un hombre de negocios, muy activo, que disfrutaba de las aventuras y deportes extremos, como escalar montañas y saltar en paracaídas. Ahora, es todo lo contrario a lo que era, y depende de un cuidador y de "Clark" para vivir día a día.

"Solo... quiero ser un hombre que ha ido a un concierto con una chica vestida de rojo. "

Voy a basar mi opinión tanto en la primera vez que lo leí, como en esta segunda vez. Si bien la historia de Lou y Will juntos es algo muy lindo, también debemos hablar de la vida de cada uno por separado.   

Empecemos por Lou, sentí mucha pena por ella y rabia hacia su familia por el modo en que la trataban, yo sentía que no le daban el crédito que se merecía. Aunque también voy a decir que Louisa me llego a molestar muchas veces por permitir que su familia la mangoneara, y todavía mas por aprovecharse de ella y del trabajo que había conseguido.

En especial llegue a odiar a Katrina, su hermana, la cual tiene un hijo, Treena tiene un trabajo, si no lo niego. Pero después de decide irse a la universidad, y Lou quiere quedarse con su cuarto, me estreso tanto que se pusiera a pelear con ella y, créanlo o no, ame cuando Lou le dice gritando que ella no tiene la culpa de que haya abierto las piernas y ahora tenga un hijo. (soy una mala persona lo se, perdón).
De su mama y su papa no puedo decir nada, ellos mismos la empiezan a tratar diferente cuando ven cuan importante se ha vuelto para ella su trabajo y también Will.

Hablemos de Will, no quiero ni imaginar lo dificil que debe ser tener que estar en una silla de ruedas y no poder moverte, no tener esa libertad. Al principio obvio que Will me molestaba por como trataba a Clark, cuando ella solo quería ayudarlo, pero después entendí su postura y el por que era tan grosero. 

Fue dificil leer el capitulo que su madre narra, creo que debe ser un gran sufrimiento el ver a algún pasar por algo así, de ese capitulo, me quede con de las tantas frases que me gustan del libro.  Ademas entendí el porque de la constante presión que le daba a la Señorita Clark. 
Y de su padre pues la verdad no puedo decir mucho, me hubiera gustado que estuviera mas presente en la historia, se que el también narra un capitulo pero no causo tanto impacto como el de la Señora Traynor.

"Necesitaba decirle, en silencio, que las cosas cambian, crecen o se marchitan, pero que la vida continúa."


Otro personaje que también sentí fue muy importante es Nathan, el otro cuidador de Will por así decirlo, era el quien se encargaba de tareas un poco mas complicadas para Lou. En las ultimas partes del libro fue un gran apoyo y la verdad me cayo muy bien. 


Ahora si, el tema central, no sentí que fuera la tipica historia de amor, puesto que es muy curioso como Lou empieza a desarrollar sentimientos por el, ella al principio del libro tiene novio y no ve a Will de un modo romántico, recuerdo que la primera vez que leí el libro me sorprendió mucho su relación con Patrick (el novio) no entendía como podía estar con alguien así. Ahora que lo volví a leer, entendí que Lou estaba con el por simple costumbre, llevaban tanto tiempo juntos que ella no conocía otra cosa, aunque para ser honestos yo no hubiera podido aguantar tanto tiempo con una persona tan egoísta como Patrick, que solo se preocupaba pon el.

Una de las cosas que mas ame de Will fue que ayudo a Louisa a salir de su zona de confort (con todo y zapatos extravagantes), la presionaba a que probara cosas nuevas y a que se arriesgara, en pocas palabras, la impulsaba a vivir. 
Y de Lou lo que mas pude apreciar fue como poco a poco entro en sintonía con Will, como llego a saber lo que le quería por sus gestos y como respondía a sus comentarios groseros con algo un mejor. 



"Sé que esta no es una historia de amor convencional. Sé que hay todo tipo de razones por las que ni siquiera debería estar diciéndote esto. Pero te quiero."

Creo que esta estrada se alargo un poco, nunca había hablado de la mayoría de los personajes en una reseña, pero este libro es especial y todos son importantes en la historia. Recuerdo haber leido en una reseña que una chica decía que nunca pensó que este fuera EL libro. En lo personal creo que si puedo considerarlo como tal, la narraccion es excelente, la trama aunque algunos pueden decir que es predecible a MI me gusto. Y el mensaje que todo el libro tiene es algo que las personas deberían de repetirse todos los días, VIVE.

"Hay amores que solo pueden vivir en tu corazón, no en tu vida"


Esta fue la reseña del libro, ojala les haya gustado, y que la mayoría de ustedes ya haya leido el libro, y si no ¿que estas esperando?. Tengo muchas ganas de ver la película y espero poder ir en los próximos días, para después darles mi opinión sobre ella. Si ya la vieron cuéntenme en los comentarios que les pareció y si es necesario llevar pañuelos extra. Un beso enorme y nos leemos en la siguiente entrada. 

Ah y por si querían saberlo, si llore como recién nacido cuando llegue a la parte final, en parte por el libro y en parte por mis desordenes emocionales y sentimentales de los últimos días. 

lunes, 20 de junio de 2016

Reseña: F*ck Love - Tarryn Fisher




Titulo: F*ck Love

Autor: Tarryn Fisher

Año de lanzamiento: 2015

Numero de paginas: 218 formato electronico










SINOPSIS: 

Helena Conway se ha enamorado.

Involuntariamente.

Inadvertidamente.

Pero no sin provocación. Kit Isley es todo lo que ella no és, –desestructurado, sin ataduras, y ni siquiera un poco cuidadoso.

Todo podría ser hermoso... si él no estuviera saliendo con su mejor amiga.

Helena deberá desafiar a su corazón, hacer lo correcto y pensar en los otros.

Hasta que no lo hace.




OPINIÓN PERSONAL:


Hola a todos!
Les cuento que de esta autora no había leido nada, en solitario, pero si había leido Never Never que fue una trilogía que escribió Colleen Hoover junto con Tarryn y la verdad esos libros me gustaron mucho, así que tenia cierto deseo de poder leer algo únicamente de ella. 

Cuando leí la sinopsis de F*uck Love, me imagine la historia y pensé que seria lo mismo de siempre, el típico amor prohibido entre la chica y el novio de la amiga. Pero como quería un descanso de las lecturas pesadas, decidí empezarlo, y vaya sorpresa que me lleve.

No es para nada la tipica situación. Para empezar los nombres de los capítulos son muy lindos, en forma de #_________ ademas no sentí que fueran tan largos, y si lo son, no se hacen muy pesados mientras estas leyendo. 

Nuestra protagonista es Helena quien tras un extraño e inusual sueño en el primer capitulo, empieza a notar al novio de su mejor amiga como algo mas. Lo diferente aquí es que ella no quiere reconocer que podría sentir  algo por el. Y constantemente se esta recordando que el es el novio de su amiga de toda la vida, ah y olvide mencionarlo, ella tiene novio también. 


"No quiero que alguien diga que me tuvo y luego me perdió. Quiero que diga que nunca dejará que me vaya."

A raíz del sueño que Helena tiene, ademas del asunto de Kit, también empieza a tomar decisiones pensando en un futuro diferente a lo que ya tenia planeado. Ella seria contadora y ahora lo que quiere hacer es Arte. Curiosamente el único que parece interesado y que la apoya es Kit.

Hablemos de Kit, el fue quien hizo diferente la historia, por que al principio no veía a Helena en un modo romántico, pero si empiezan a desarrollar una amistad, en donde lo único en común que tenían era Della (la mejor amiga, y una completa perra).


"La peor parte de un abrazo es el olor. Si abrazas lo suficiente a una persona, su olor se vuelve familiar y lo asocias con comodidad, intimidad y cercanía."

Mientras que la historia avanza, podemos leer que Helena hace todo lo posible por resistirse a lo que esta empezando a sentir por Kit, pero el asunto se complica aun mas cuando esta termina con su novio por un asunto que no les diré jajaja. 

"—Amo cuando me hablas en Harry Potter. ¿Quién soy yo?
—Tú eres una muggle que quiere ser mágica. "

Después de para Helena es imposible seguir conteniendo lo que siente por Kit, toma una decisión, mudarse a Seattle, pero después de una visita a la ciudad de la infancia de Kit, decide quedarse a vivir en el pintoresco puerto de Port Townsend. Por obra del destino termina viviendo con la ex novia de la preparatoria de Kit, y esta chica Greed, la cual le enseña muchas cosas y la ayuda a ganar confianza en si misma. 

Después de este punto me di cuenta por que Tarryn y Colleen son buenas amigas, y es que a las dos se les ocurre todo tipo de giros posibles en una historia, en serio que no me los esperaba, llego un punto en el que yo pensé que ya seria el final, y no, las paginas seguían y seguían.


"Pensamos que podemos controlar nuestras vidas, pero nuestras vidas nos controlan. Y todo lo que tocan nuestras vidas nos controlan. Las personas tienen menos poder del que creen que tienen. Solo son las reacciones las que controlan."

Y fue como tipo montaña rusa, en un momento las cosas iban tan bien y luego todo para abajo, y luego paso lo que menos esperaba y Helena vuelve a casa solo para demostrar lo buena persona que es, y luego otra vez todo va mal, y el final, dios mio el final estuvo de muerte, por un momento pensé que no lo lograrían pero tuvo un buen final, justo y necesario. (En este párrafo se me salio un poco lo fangirl) 

Quede totalmente encantada con este libro y con la forma de escribir de la autora, ademas que el Pdf que leí tenia ciertas frases subrayadas y hubo algunas que seguramente yo también habría escogido. Otro punto a favor fue que a la protagonista le gusta mucho Harry Potter y utiliza ciertas frases y palabras en varias partes del libro. 

En fin, ya me extendí un poco, es un libro muy bueno, con un excelente ritmo en la lectura y para nada predecible, créanme en esto, si han leido alguno de los libros de Colleen y les gusto, deben leer este. ;)


"Si cada una de nuestras vidas representase la página de un libro, la felicidad sería la puntuación. Separa las partes que son demasiado largas. Cierra algunas cosas, divide otras. Pero es breve, aparece cuando se necesita y llena párrafos agotadores con descansos."

Eso fue todo, si pudieron darse cuenta la semana pasada no subí ninguna reseña, me tome un descanso de ese tipo de entradas, pero ya el día de hoy retomamos ese ritmo. No se olviden de dejarme un comentario, cuéntenme si ya lo leyeron o si han leido otro libro de Tarryn. 
Los quiero mucho y nos leemos en la proxima entrada, Bye!

viernes, 17 de junio de 2016

Ayudando a un amigo #3

Hola!
Es ese día del mes en que presto un espacio en este humilde blog a una persona para publicar y compartir con ustedes algún texto de su creación... creo que para este punto ya saben de que trata esta sección, así que mejor los dejo con la historia por que es un poco larga, para una entrada claro.


Relato

Cuando era niño, pocas cosas gustábanme tanto como aplastar ranas en los pastizales contritos de los terrenos baldíos de mi pobre barrio. Me entusiasmaba tanto, incluso entonces, ver aquellas repugnantes criaturas dando horrorizados saltos en busca de huida, y sentirlas morir crujiendo espantadas, bajo la pisada caprichosa de un ser por mucho superior a ellas: travieso, inexorable y mortal, como un Dios chiquito jugando a matar. Podían no hacer nada más que croar suplicantes, mientras mi convulsa risa chillona se pronunciaba alta entre el estruendoso trajín de la hecatombe de mi diversión. Solo hasta ahora parece ridículo, años más tarde, recordar, en el sorpresivo devenir de una inoportuna ironía; aquellos juegos pueriles, bajo el pisotón implacable del destino.

Mi mejor amigo se llamaba Marquitos. Lo recuerdo porque en ese entonces le decíamos “Mantequilla”, era tan tonto a causa de un trastorno psicomotriz y un nacimiento prematuro, que cualquier torpeza suya nos partía de risa, y Marquitos como siempre, como intentando proyectar fuera de él la humillación, se conformaba, tan lastimero como podía, con reírse mansamente de sí mismo, en su humilde resignación habitual. Él se había mudado hace un par de años atrás de aquellos tiempos; sus padres habían muerto en un mismo mes, según supe escuchando los parloteos de las viejas chismosas del barrio: uno, a causa de una diarrea mal cuidada y el otro, por un apéndice que se reventó; aunque nunca supieron, los chismorreos del arrabal, atribuir correctamente la muerte correspondida a cada uno, no me interesaba saberlo. Por lo tanto, él y sus tres hermanos fueron puestos a disposición de sus familiares más cercanos, como es común. Los más pequeños en una provincia al poniente del país con su tío “El Terrateniente”, su hermana –la mayor–, fue enviada a la capital a concluir sus estudios medios; y Mantequilla… Con él no hubo más opción que mandarlo con la única tía disponible que le quedaba. Desgraciadamente, la más pobre y enferma de todos sus posibles tutores. 

Entre lo permitido por nuestra rebeldía infantil y el aburrimiento, Mantequilla y yo creamos una pequeña pandilla, por más diversión que infamia. Conformando un escuadrón de traviesos chiquillos junto a Rafael “La Pelota”; Daniel “El Visco” y Dolores Arturo a quien llamábamos tal cual. Empecinados en volver locas a las señoras rechonchas del arrabal; a quienes escondíamos la ropa de los tendederos o les rompíamos las macetas de barro arrojándoles piedras, y a las ventanas de los balcones y arrancábamos las flores de sus jardines para emprender la fuga entre carcajadas y berridos. Eran días gloriosos y estivales, reinaba la alegría en nuestros corazoncitos de niños que solo necesitaban de sus amigos para ser felices a pesar de las desgracias. Y si de cuando en vez recibía duros garrotazos de mi madre no importaba, volvería al día siguiente a las andanzas, correteando y gritando detrás de una hazaña que le sacara de quicio. Por mi parte, prefería llamar la atención general del barrio, soñaba con hacerme un nombre como el niño más audaz de los lares, aquel incorregible que a plenitud, ensuciábase jugando con el barro de la felicidad que aquellos adultos ya habían perdido.  

Papá, por llamarlo así, era “el carpintero” de los alrededores; no era siquiera bueno, pero era el único que había. Su oficio y nada más, daba para poner pan y sopa en nuestra mesa. Se esperaba de mí aprender su técnica para relevar al viejo en sus labores cuando la artritis finalmente le destrozara las manos y la miopía le impidiese la vista. Pero en ese entonces mi preocupación era jugar con mi pandilla y tampoco quería soportar el sofocante tallercito improvisado en la cocina, trabajando forzosamente entre el aserrín abultado del piso y los platos sucios sobre la mesa y el polvo; por todo lo demás –pensaba yo–, para remplazarle estaba Juan Carlos, mi hermano el grande, cual todavía era mucho peor labrando madera que el viejo. En nuestra casita de ladrillos y ocre barro, se erguía pobremente una bardita de piedra calada a su alrededor. Por dentro, las seis gallinas que mi madre alimentaba habitualmente, con masa y granos, apenas daban huevos poquitas veces al año y cuando lo hacían, eran tan pequeños como de codornices, que cinco de ellos no podrían alimentar más que a una sola persona; se había decidido, por tanto, intercambiarlas por algunas ropas viejas para mi hermano y para mí; ropas que a la primera oportunidad, con la infantil ingratitud de mis descuidadas brusquedades, desgarré trepando entre los árboles y al revolcarme sobre la terracería jugando con mis compañeros de diabluras. Recuerdo, ahora triste, el llanto amargo que mi madre sufrió una noche entera, remendando mis ropas ajadas para que yo pudiera ir vestidito en las calles del pueblo. Casi siempre el calor en mi casita era insoportable, su techito de lámina irradiaba intensamente con abyecta incandescencia, volviendo un horno el lugar entero, especialmente, aquellas tardes donde el serrucho incansable de papá lo hacía empapar de sudor sus ropajes, dejándolo rendido, desfalleciendo y con callos abiertos en las manos, hasta que un día, en el medio de su insufrible labor, lo fulminó un infarto. Nunca le pude llorar. 


Para el año siguiente ya había dejado la escuela, a falta de recursos. Pasaba largos ratos con Marquitos y Dolores Arturo en la plaza del pueblo, dando puntapiés a los talones de los transeúntes para hacerlos trastabillar y pidiendo dinero a otros menos desafortunados. Robábamos dulces de los mercados de pulgas y cualquier otro objeto que a al alcance de nuestras manos, los distraídos dependientes, no fuesen capaces de salvar; jugábamos entonces, ya alejados de su vigía, a vender nuestros recién adquiridos bienes por moneditas que repartíamos por igual. A finales de un agosto agravó Consuelo, –la tía de Mantequilla¬–. A causa de la tisis quedó loca en cama y murió de fiebre cuatro días después, con los ojos tan blancos como huevos cocidos y una cara enmudecida de indecible espanto. Pensamos todos, entonces, en el destino del pobre lelo. Se daba por hecho que sería llevado a la capital junto con su hermana Patricia o a las Villas con el coronel Arturo y los menores, pero no fue así. Le habían abandonado por completo y nadie acudió a su rescate, ni siquiera cuando a falta de un testamento le requisaron la casita de su difunta tía y le dejaron en la calle como a un perro sin dueño y detestado. Jamás les culpe, después de todo, quién en sano juicio quisiera cargar sobre sus hombros la angustiosa responsabilidad de cuidar a un chiquillo tan tonto y enfermizo como lo era Mantequilla. Por todo lo demás él era feliz, o al menos, esa impresión me daba cuando no se le veía llorando desconsolado a causa del hambre y del miedo a estar solo. 

Veía, al pasar el tiempo, cada vez con menor frecuencia a La Pelota y al Visco. Se decía que en sus casas –también humildes–, les habían prohibido hacer amistad con Dolores Arturo y conmigo, por ser él mayor y peor influencia incluso mía. A decir verdad, a pesar de haber seguido estudiando en la escuelita local, ellos eran tan malcriados como cualquier otro miembro de la pandilla, que ciertamente, había aumentado en número los últimos años. Ya no solo les robábamos a las viejas por diversión, frecuentemente, era también por necesidad. 

Una tarde al sol poniente, en el otoño de la víspera de mi temprana juventud, maté a un hombre. Le ahorqué con un cinturón de cuero marrón enmohecido, con tanta rabia que mis manos temblorosas se abrasaron hasta sangrar. Se trataba de Rafa, “La Pelota”. El gordo inmundo había acusado a tres colegas por el robo de un collar de oro y siete alhajitas de plata, entre ellos, a Dolores. Jamás pude perdonarle aquella cobardía, después de todo, habíamos sido amigos cuando éramos pequeños y su traición me ensombreció tristemente hasta el día de hoy. No se supo nunca quién fue, se sospecharon teorías diversas que apuntaban a uno y a otro miembro de mi banda, ya entonces crecida. Incluso su madre, aquella misma noche de hallado el cuerpo en el monte, golpeó la puerta de cada casa donde vivían mis compañeros de pillaje –incluyendo la mía–, exigiendo a gritos ahogados entre el gigantesco llanto y el ardiente dolor que le destrozaba por dentro, como el que solo una madre puede sufrir en tan malditos casos; que por favor, le devolviéramos a su hijo. La policía no hizo preguntas, por todo lo demás, ¿A quién podría importarle que hallasen muerto a un estudiante pobre en un pueblo inmundo como el mío? Preferí no hablar de ello, ni siquiera con los amigos que aún me quedaban en el mundo. 

Mamá envejeció deprisa. Lo noté apenas, una vez mientras ella fregaba los pisos de nuestra casucha. Cuando clavé la mirada fija en sus ojos marchitos y sus huesudos pómulos. Le miré las manos arrugadas y las comparé con el último recuerdo que tenía de ellas, al erguirse suspirando de cansancio comprobé lo temido, habíasele desarrollado sobre su flacucha figura una joroba. Me asustó no haberme dado cuenta de ella antes. Cómo la pobreza y cómo la angustia del hambre le habían comido la vida, sus energías y lo bonita que había sido. Las canas enmarañadas de su cabeza atestiguaban el duro acontecer de los años, la pérdida de mi padre, sin duda, había contribuido enormemente a la decrépita degradación de su cuerpo, y su pronta ceguera era casi inminente para esa mirada grisácea de cataratas. Casi parecía como si hubiese enviudado de sus ganas de seguir viviendo. “Mamá envejeció deprisa, mamá envejeció deprisa…”, sentencié con amargura en repetidas ocasiones, abrumado, a lo largo de aquel doloroso día, hasta que de pronto, aliviado, dejó de importarme. 

Juan Carlos, heredó de papá la incapacidad para trabajar madera, por tanto, tras cortarse accidentalmente la cabeza de su dedo índice izquierdo con un serrucho, vendió como pudo, por una miseria, las herramientas del tallercito de carpintería. Procuró entonces conseguir dos trabajos, aunque muy mal pagados; ya casi nunca se le veía en casa, a causa de las extensas jornadas que se le imponían injustamente, pues se abusaba de él sabiendo su necesidad. Con el dinero que obtenía de su explotado empleo en un huerto a la salida del pueblo y en una granja de cochinos, aledaño a cinco kilómetros del primero, apenas alcanzaba para mantenerse a sí mismo, a mi madre y a mí. Como es natural, a la primera oportunidad me golpeaba tan duro como no lo hizo nunca antes nadie, alegaba con tanto coraje y desprecio, que de no ser por él, nos hubiésemos hundido aún más en la miseria y que por lo tanto yo, solo era un parásito en las vidas de la familia. Tenía razón. Procurarme un empleo no estaba en los planes de mi vida temprana y tampoco lo estuvo tras morirse mamá, ni cuando prohibió permitirme vivir en la casa donde ambos habíamos nacido y crecido juntos.   No volvimos a cruzar palabra, ni cuando por casualidad, nos encontrábamos en cualquier lugar del pueblo o en alguna cantina. Lo curioso era, que a pesar de ser el único beneficiario de su trabajo, parecía haber caído más profundo en la pobreza de antes; su reciente adicción a la bebida y al juego, rápidamente le cambiaron. Tiempo después perdió la casa, debido a un mal negocio del que nunca supe gran cosa, con el poco dinero que le quedó, se marchó del pueblo y nunca más supe de él otra vez.

Yo me instalé con Mantequilla, por caprichos de la suerte, junto a Jorge y Sergio, dos bandidos de segunda que nos habían acogido en una vieja casa a las afueras del pueblo y donde pagábamos pensión. Sin embargo, el moho y el polvo de la pocilga hacían de la vieja estructura un lugar inhabitable y de insufrible desagrado. No obstante, aún más inaguantable era Marcos, quien nunca, desde la muerte de su tía, había dejado de hablar cada día de lo maravillosa que sería su vida cuando El Terrateniente viniese por fin a llevarlo a sus Villas hacendadas y lo hermoso que sería montar a caballo por los prados de aquel verde paraíso imaginario. Otras veces el delirio cambiaba de contexto y parloteaba a viva voz –de inocultable retraso mental– de aquellos coches lujosos en donde pasearía con su hermana en las tardes, entre los altísimos edificios de la capital que apenas si era capaz de recordar, cómo eran, según le habían contado sus padres cuando niño. Era descorazonador para mí; su enfermedad aunada al hambre y al abandono, habíanle trastornado mucho más su mentecilla todavía de infantil.  Yo le comprendía, pues le conocí desde pequeño el sufrimiento y el horror de su desgracia; sin embargo a Jorge y a Sergio los volvía locos con sus parloteos incesantes y sus fantasías estúpidas. Al principio intentaba impedir que le golpeasen para acallarlo, al cabo del tiempo, nunca supe a partir de qué momento, prescindí de todo y lo apabullaba con más violentas golpizas de las que recibía de los otros dos habitantes del cuarto en un inicio: primero, con la intensión de hacerlo callar; después, por mera costumbre y desahogo de mi miserable existencia.

Una madrugada Mantequilla despertó gritando. Se agitaba con violencia salvaje, como un perro rabioso, enloquecido, tirando de sus pelos con tanta fuerza que a puños los desprendía de su cabeza. Balbuceaba inentendibles frases desarticuladas y horrendas, como si su mente, en un lapso de sueño, hubiese terminado por reventar, reduciendo hasta las cenizas su poco cerebro, en el ardor de la incontenible fiebre que parecía estarlo matando. El suplicio de intolerables minutos, entre gritos descomunales, al calor de la noche, alargaba a horas la sensación de lo vivido. La desesperación y el hambre, el cansancio y la inexperiencia hicieron de nosotros tres, los seres menos indicados en el mundo para remansar a Marcos. – ¡CÁLLALO, CÁLLALO! O voy a ser yo quien le cierre la puta boca por siempre. Me gritó turbado uno de los despreciables bandidos, que sin dejar de rondar desesperado por el mugriento cuartucho, a oscuras, daba la impresión de ser una voraz fiera endiablada merodeando sobre su moribunda víctima antes de atacar.

Su secuaz y yo, en medio del nervioso pánico y de la histérica desesperación de cuales éramos presas, nos arrojamos a sostener inútilmente los brazos del enfermo mental; con tal fuerza, fue capaz de arrojarnos al suelo, quien inconsciente de sí y de su propia locura, continuaba gritando en brutal desenfreno. Mis aterrorizadas manos temblaban, pero logré lanzar al que alguna vez fue mi amigo a un lado del mugroso colchón de donde había despertado una escena de pesadilla. Apreté con mis dedos, hasta el límite de mis fuerzas, enterrando las uñas en sus sanguinolentas mejillas, más por causarle dolor que para calmarle. Mis gritos se fundieron con los suyos, mis puños cayeron implacables en su durísima cara, abriendo la piel y la carne cada vez que con inexorable odio le golpeaba; a mi esfuerzo por callar al desquiciado se unieron los dos canallas que habían observado entusiasmados, al ver que funcionaba, mi imperdonable maquinación. Con la sacudida excitación de la adrenalina de aquel ruin momento, unieron los cobardes, sus desgraciados abusos a los míos, en una tortuosa brutalidad tan cruda como abominable y repulsiva. Los gritos y delirios de Marquitos, después de largos minutos que parecían interminables, de súbito, se apagaron, entre el clamor del sufrimiento, del horror y del dolor, y con ellos, para siempre… Su vida. 

A la luz del pálido resplandor de la luna que entraba tímida por la ventana, como espantada y consciente del infame crimen que terminó por cometer nuestra contagiada locura, se divisó entre la penumbra, un descarnado cuerpo, ultrajado por puñaladas y violentado hasta donde tres hombres viles son capaces, antes de desvanecerse por el cansancio físico del extenuante esfuerzo que requiere el sádico asesinato a golpes de un hombre. Los chorros de la maloliente sangre que mancillaron nuestras manos, ahogaban el decadente piso de madera de la habitación y el sabor de la desgracia quedaba impregnado de herrumbre en nuestros paladares y bocas secas. Mis oídos comenzaron aturdidos a zumbar y un escalofrío de muerte recorrió por mi sudada espalda. – ¡Maté a Marquitos, maté a Marquitos!, dije con ansiedad enervada, en la angustia de la sorpresa de quien despierta de un maniático trance. Quise entonces revolcarme, llorar, besar el desfigurado rostro ensangrentado de aquel que una vez fue un triste niño que yo había jurado proteger con mi amistad en medio de las crueles desgracias de su infortunio, pero no pude, nada de mí salió a pesar mío; sentí el hueco de la ausencia de una emoción que provocara en mí un retorcido arrepentimiento inmediato por la fatalidad de mi infamia, de la falta a mi juramento de ser el hermano que nunca le abandonaría, de haber matado a quien nunca quiso separarse de mí jamás y a quien el destino conspiró para atraerlo a mi fatídica maldad. 

En la serenidad de la ingrávida calma que viene detrás de una terrible tormenta, un hombre hundió en sangre ajena sus rodillas y se echó a llorar miserablemente; tratose de Sergio, quien condicionado por el asco repentino que sintió de sí mismo, se santiguó incontables veces frente su causado difunto rogándole a Dios que le perdonara. Nada más verle me hizo odiar el cínico descaro con que los hombres esterilizan su consciencia en el mortecino fuego de la hipócrita indignación de sus actos. Jorge, en cambio, mientras yo estaba inmóvil, plantado de pie junto al horrible finado y al reconvertido religioso, había salido huyendo fuera de la pocilga sin que nadie lo hubiese advertido, hasta ahora. Un terrible miedo me atravesó cada nervio, ¿Sería acaso que alguien, al exterior del recinto nocturno, hubiese atestiguado los inconfundibles gritos de nuestra víctima y sus asesinos? ¿A dónde habíase largado Jorge, que sin pensarlo dos veces, abandonó la habitación? ¿Sería capaz de delatarse Sergio, por arrepentimiento, y arrastrarnos al presidio junto a él? Tantas preguntas sacudieron mi cabeza al mismo tiempo, no podía tomar ningún riesgo en aquel momento y debía pensar rápido a pocas horas del amanecer…

(INCONCLUSO).



Y eso fue todo, aunque no duden que la historia continua, pero ni siquiera yo se como, próximamente voy a empezar a cobrar por cuartilla publicada en el blog, jajaja, es broma, lo juro. Me gusta ayudar a las personas. No duden en dejar un comentario con su opinión, critica constructiva o reclamo, yo me encargo de que el autor se entere. 
Nos leemos en la próxima entrada, un beso, bye! 




jueves, 16 de junio de 2016

Capitulo 2 "Sobre Alicia"

Hola chicos y chicas!
De nuevo les quiero dar las gracias por todos sus buenos comentarios en las partes anteriores de la historia y en la entrada de A mi estrella favorita en el cielo, fue algo especial para mi y me alegro que a muchos de ustedes les haya gustado, si no la han leido solo den click AQUÍ.

Y para los que no saben quien es Alicia, aquí les dejo las entradas anteriores de esta historia. 

Prológo AQUÍ

Capitulo 1 AQUÍ


Y ahora si, aquí esta la parte 2:

Tuve el tiempo justo para intentar limpiar un poco, la palabra clave fue intentar. Aunque tampoco tenía mucho espacio por limpiar, mi modesto apartamento apenas y tenía espacio. Solo estaba conformado por la sala, la cocina, y una habitación con baño incluido. Además, como casi no estaba en todo el día, no había desastre alguno más que los platos sucios de la cena del día anterior.
Eran exactas las 4 cuando tocaron el timbre, no pude evitar alisar mi ropa cuando abrí la puerta.

- Hola Alicia- sí, hay estaba esa mirada de arriba hacia abajo analizando lo que llevaba
- Hola mamá, ¿cómo estás?
- Muy bien, gracias por preguntar

Sé que pensaran cuan formal era mi madre conmigo, pero así era ella con todas las personas.

- ¿cómo has estado Alicia?
- Bien mamá
- ¿Limpiaste antes de que llegara verdad?
- Sabes la respuesta a eso
- ¿De dónde sacaste esa blusa? - pude apreciar un tono de desprecio en su voz
- De una tienda vintage, estaba en oferta
- Y se nota
- Ya mamá no empieces por favor, ¿quieres pedir algo de comer?
- italiano por favor-

Se quejaba de mi ropa, pero se ponía altanera con la comida. Mientras pedía la comida, era obvio que estaba inspeccionando mi departamento, siempre hace eso, cada vez que viene,

- El otro día le dije a tu papá cuanto pagabas de alquiler...
- ¿Ah sí? - no quería llegar a ese punto de la platica
- Al igual que yo, no entiende cómo puedes pagar tanto por un lugar así, y cree que lo mejor es que vuelvas a la casa
- No mamá, ya te dije que no voy a regresar, tengo un buen trabajo y me gusta vivir aquí. -
Ni siquiera tenía caso discutir, ella no cambiaría de parecer.
- No tienes por qué trabajar en un lugar así, tu padre gana suficiente como para mantenerte.
- ¡Necesito un trabajo mamá, necesito ganar mi propio dinero, tengo 23, casi 24 por dios!
- Si lo que quieres es un trabajo, tu papá puede conseguirte uno mejor
- Si mama, ya intentamos eso y no nos fue muy bien.
- Eres tan terca, no se de quien lo sacaste
- Yo tampoco, tal vez soy adoptada.

Ese fue el fin de la plática, le propuse buscar una película para distraerla de su sermón. La comida llego a mitad de "Magnolias de Acero" la versión con Julia Roberts, era la 5ta vez que la veíamos, pero no quería empezar a discutir de nuevo.
Después de terminar de comer y que la película acabara, doña Laura me ayudo a lavar los platos sucios, (eran dos platos, dos vasos y dos tenedores, pero sabía que quería alargar más su visita).

Antes de tomar su bolso me miro nerviosa, oh no, me iba a pedir un favor, un favor que no iba a querer hacer.

- La próxima semana es la cena anual de la empresa, tu padre quiere que vayas con nosotros
- ¿Que esa cena "anual" no fue hace dos meses?
- No te hagas la graciosa, ¿podrías ir?
- Si no estoy ocupada ese día tal vez
Mi mama me lanzo una mirada que casi parecía una china de tanto que cerró los ojos.
- Iré, acabo de comprar un lindo vestí- Me interrumpió drásticamente
- No, ya te mandare yo lo que debes ponerte
- Mamaaa... ya no tengo 5 años para que me vistas
- Te mandare un vestido y a la estilista para que te arregle, no se diga mas
Si, ese era el final de la plática.
Como no queriendo la encamine a la puerta
- Bueno mamá, fue un gusto pasar la tarde contigo, pero creo que dormiré temprano hoy
- Ya me voy, no es necesario que me corras, te enviare un mensaje con los detalles de la cena
- Si mamá, no te preocupes. Nos vemos luego y saluda a mi papá por mi. -

Los pondré al tanto de lo que pasa con mi familia, mi papá es casi el dueño de una de las empresas textiles más importantes de España, y digo el casi dueño porque es el socio que posee la mayor parte de las acciones, cuando me gradué de la universidad y conseguí mi título en Marketing y Comunicaciones, me ofreció un puesto y en su momento acepte, pero a las pocas semanas me di cuenta que ese no era mi trabajo ideal, yo quería trabajar en alguna editorial, con alguna revista y el hecho de que mi padre fuera alguien importante en la empresa no me facilitaba la relación con los demás empleados.

Pensé que mi papá entendería, pero al parecer su sueño frustrado era que yo trabajara con él y al negarme quiso imponerme una serie de restricciones con las que no estuve de acuerdo, el asunto empeoro con los meses y como yo seguía sin aceptar volver a la empresa, cancelo mis tarjetas. Creo que pensaba que de esta forma no me quedaría de otra que volver.

¿Y que hice yo? Como cualquier mujer de 23 años, tomé la decisión más lógica, me fui de la casa.  Al principio mi mejor amiga me aguanto en su casa unos días, en lo que conseguía un trabajo, para mi suerte una semana después empecé a trabajar en una de las revistas de moda de la zona.

Y con mi primer sueldo, pague el depósito de este pequeño lugar, han pasado casi 6 meses desde que vivo en este lado de Barcelona y me las he arreglado muy bien hasta ahora.

Tengo fe en que seguirá siendo así. 
...

Y hasta aquí llega lo de hoy, como pudieron ver en esta parte conocemos un poco mas de la vida de Alicia y la próxima semana sabremos mas sobre el misterioso ladrón de asientos. No se olviden de dejarme un comentario, cuéntenme que les pareció y nos leemos en la próxima entrada :) 
Un beso, bye!



P.d también les quiero decir que el blog ya tiene cuenta de Instagram, aun no subo nada pero me ayudarían mucho siguiéndola, solo den click en el logo. 

martes, 14 de junio de 2016

Book Tag: 7 cosas sobre libros

Hola Hola!

Hace ya un tiempo que no subo ningún Tag al blog, asi que el dia de hoy les traigo el Book Tag de 7 cosas sobre libros,  este lo encontre en el blog Reading Books , solo den click al nombre para que vayan a leer sus respuestas. 

Sin mas por el momento, vamos a empezar :)




7 Libros que debo leer antes de morir

1.- Cumbre Borrascosas - Emily Brontë
2.- Verónica decide morir - Paulo Coelho
3.- El Psicoanalista - John Katzenbach
4.- It de Stephen King (o alguno de sus libros)
5.- La probabilidad estadistica del amor a primera vista - Jennifer E. Smith
6.- Harry Potter (TODOS LOS LIBROS)
7.- El jardín secreto Frances Hodgson Burnett



7 Citas Literarias

1.- "Hay amores que sólo pueden vivir en tu corazón. No en tu vida." - JoJo Moyes (Yo antes de ti)

2.- Ella me "amo" en comillas.
Me beso en negrita.
INTENTE QUEDARME CON ELLA, todo en mayúscula.

Se fue con puntos suspensivos...    Ben James Kessler - Colleen Hoover (November 9)


3.- "Aceptamos el amor que creemos merecer" - Stephen Chbosky (Las ventajas de ser invisible)

4.- Y de ese modo el león se enamoro de la oveja 
     -¡Qué oveja tan estúpida!
     -¡Que león tan morboso y masoquista!   Stephenie Meyer (Crepusculo)

5.- A veces hay que elegir en la vida, y a veces la vida te elige a ti. ¿Lo entiendes? - Gayle Forman (Si decido quedarme)

6.- "Es tan corto el amor y tan largo el olvido" Pablo Neruda (20 poemas de amor y una canción desesperada)

7.- Al fin y al cabo somos lo que pensamos. Los sentimientos son esclavos de los pensamientos y uno es esclavo de sus sentimientos -  Elizabeth Gilbert (Comer Rezar Amar)



7 Personajes Masculinos 

1.- Christian Grey
2.- Travis Maddox
3.- Romeo Prince 
4.- Rush Finlay
5.- Liam Page 
6.- Ben Kelly
7.- Eric Zimmerman


7 Personajes que quiero matar

1.- La Sra. Robinson - 50 SDG
2.- Marcy Millar - Hush Hush
3.- Alicia - La chica del servicio
4.- Christa Peterson - El infierno de Gabriel
5.- Valentino - Bajo el cielo purpura de Roma

Aqui solo pondre 5 por que la verdad es que casi nunca siento mucho odio hacia alguien como para querer matarlo jajaja.



7 Cosas que odio en los Libros

1.- El amor instantáneo, ese en el cual se acaban de conocer y ya se aman profundamente, un poco de realismo no estaría mal.

2.- Lo predecible, tipo estas leyendo que la protagonista le llama a su novio que esta de viaje y este no contesta su teléfono... y automáticamente piensas que la engaño o mejor aun le tendieron una trampa.

3.- La falta de realidad, como que son pocos los libros donde he leido que a la protagonista le llega su periodo, perdón pero es la verdad. 

4.-  Las partes innecesarias, esas que no aportan nada al libro mas que mas paginas, pero que no tienen ningún propósito para la historia. 

5.- Las muertes injustificadas, Suzanne Collins nunca te voy a perdonar el haber matado a Finnick. NUNCA!

6.- Las protagonistas que siempre son damiselas en apuros, todo el libro, y siempre las están salvando. 

7.- Las continuaciones innecesarias. 



7 Escritores

1.- Colleen Hoover
2.- Gayle Forman
3.- Jennifer L. Armentrout
4.- Jamie McGuire
5.- Abbi Glines
6.- Kendall Ryan
7.- J.K Rowling (No he leido ningún de sus libros, pero es obvio que son  muy buenos)



7 Blogs para Nominar 

Esta vez no voy a nominar a ningún blog, por que siento que luego se sienten obligados a responderlo, prefiero que si a alguien le gusto el tag y tiene ganas de hacerlo sea por su propia voluntad, eso si, si deciden hacerlo déjenme en un comentario el link a su entrada cuando este lista para poder leerla, me encantaría eso. 
Por mi parte eso es todo, espero hayan pasado unos momentos divertidos leyendo esto, déjenme un comentario si coincidimos en algo y si no, también. 
Nos leemos en la próxima entrada, un beso :)